El otro día, curioseando los últimos vídeos del Angry Videogame Nerd, redescubrí uno de los juegos con los que más me había entretenido y martirizado a la vez mi ladrillo-consola Game Boy (sí, ésa que entraba con total suavidad en los bolsillos traseros de nuestros tejanos). Se trata del purgante y desagradecido Return of the Joker en su versión blanquinegra; título que ahora que por fin había conseguido borralo de mi mente regresa con renovado rencor, como un espíritu que prefiere dar la brasa a hallar reposo. El bueno del Angry, una vez más, se apunta a la fórmula Planeta Deagostini y repasa los bodrios de los personajes que han vuelto al candelero gracias al celuloide. Flaco favor me has hecho, chaval.
En los días en que a Batman no le habían nombrado caballero aún, surgió una hornada de títulos para diferentes plataformas que tenían en la aparición del Jóker como enemigo final/ guest star su mayor encanto. Uno de ellos llegó a parar a la prolífica Game Boy, y lo descubrí gracias a un cartucho pirata chinesco que tenía la nada deseñable cantidad de 64 juegos al precio de un paquete de pipas. En la época en que no había internet, los asiáticos eran los reyes del mambo, indiscutiblemente. La de dinero que se ahorró mi sufrida madre gracias a ellos... De pequeños, en casa teníamos la coña de que los reyes magos venían de Taiwán. Ya me encargué yo de pegarles una patada en el culo y enviarlos al lejano oriente (Japón).
La cuestión es que no entiendo cómo pude tener tanta paciencia con este juego. Emana más pestilencia que las alcantarillas de Gotham City, en donde se desarrolla la primera fase. Para empezar, el hombre murciélago no anda, patina: el control es peor que hacer submarinismo en un río de lava. No vale la pena intentar apurar para llegar a un borde, ya que Batman caerá irremisiblemente al vacío. Quizá la mejor solución fuera utilizar cuerdas para colgarse y desplazarse por las plataformas superiores... pero aquello era salir del fuego para caer en las brasas. Las probabilidades de quedarse colgado del lugar al que apuntabas eran rídiculas. Si te da por jugar, antes de que tengas éxito en tus intentos con las cuerdas, Akira Toriyama habrá retomado el manga de Dragon Ball y habrá dibujado ya tres arcos argumentales completos.
Lo peor de todo es que cuando por fin has conseguido suspenderte del techo (de otros lugares es prácticamente imposible), unas tuberías te impiden el paso y te obligan a desplazarte de nuevo por el suelo. Perfecto.
Lo peor de todo es que cuando por fin has conseguido suspenderte del techo (de otros lugares es prácticamente imposible), unas tuberías te impiden el paso y te obligan a desplazarte de nuevo por el suelo. Perfecto.
Otra cosa graciosa de esta primera fase (no tuve valor para continuar más, ni antes ni ahora) es que cuando explotan unos depósitos de agua, las alcantarillas se inundan y se producen marejadas cada cierto tiempo... que restan vitalidad a Batman si le tocan. Lo entendería de tratarse de agua infecta extraída del pozo ciego con mayor índice de putrefacción y radioactividad del mundo, pero que este superhéroe pierda energía porque simples aguas residuales han tocado sus pies, perfectamente aislados gracias a sus botas reforzadas... Es como si una paloma le cagase en el hombro y le dejara en coma (aunque no parece tan descabellado... a saber qué porquerías ingestan esos bichos).
Recapitulando... Todo un despropósito de juego, aunque siempre habrá alguien que con tesón pueda llegar a dominar sus controles y pasar por alto sus bobadas. De hecho, con perseverancia puede lograrse todo en esta vida, dicen. Ah, y no todo podría ser malo, claro está. Algo meritorio también tiene esta aventura: confirma a quienes la prueban que los videojuegos basados en licencias ya eran malos en tiempos de los 8 bits. Nunca podremos decir que no nos tenían avisados.
5 comentarios:
Me parece q caiste bajo el problema del "tener demasiado donde elegir" y te perdiste un juego con bastantes buenos momentos.
Este juego yo lo tengo original y me lo pasé hasta aburrirlo, tiene sus cosillas malas como todos, pero sin duda los enfrentamientos contra los jefes valen muxo la pena (asi de memoria el "samurai con efecto pinball" y el "m1 abrams" son dignos de elogio.
El juego sinceramente no es muy dificil y graficamente es de los mejores de Game Boy... te recomiendo que le des una opotunidad mas... quizá la primera fase es la mas complicadilla el resto no es para tanto.... ^____^
Por cierto, muy entretenido y nostalgico ;P tu blog!! un saludo!!!!
Hola Axl!
Estoy convencido de que el juego no es tan ruin como lo pinto, desde luego :) solo me hace gracia la manera en que te quitan las ganas de seguir avanzando en esa primera fase; tendría que haber servido de gancho y alentarte a continuar jugando. En cambio, era bastante desesperante, jeje.
Mi problema fue ése, que en aquel cartucho piratilla tenia otros 63 juegos, si lo hubiera comprado original seguro que habría perseverado para rentabilizar la compra algo más, como tú hiciste :D
Hay otro juego, también de GB, que tiene ese mismo problemilla pero elevado a un nivel de absurdidad galopante. Ya comentaré mi experiencia con él, ya... XD Seguro que sabes cuál es.
saludos y gracias!!
a mi se me ocurren 2:
Battletoads (la fase donde te persigue una bola es imposible)
Star Wars (aunque un servidor se lo pasase en 2 dias, reconozco q su dificultad roza lo absurdo... a no ser q hagas una "trampilla" al principio del juego ;P).
Yo tambien lo jugue en su tiempo, y recuerdo haber estado atascado nada mas empezar un buen tiempo... pero una vez le cojias el tranquillo no lo recuerdo tan malo.
Y si hablas del Star Wars de GB, yo me lo paso con los ojos cerrados y sin trucos ^o^.
no es un truco propiamente dicho, es simplemente entrar varias veces en una cueva del desirto para conseguir una cosita.... ^____^
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